miércoles, 22 de febrero de 2012

Política. Hipocresía, hipocresía, hipocresía


Estoy muy indignado, estoy muy triste, pero más aún, estoy muy enojado, con mucha bronca, sobre todos con esos funcionarios públicos responsables de lo que debería ser el correcto funcionamiento de la sociedad, que piden una suba del 100% de sus sueldos, seres codiciosos, egoístas e inhumanos, carentes de valores sociales.


Que les puede importar a estos funcionarios la seguridad de los ciudadanos, si saben que es muy poco probable que seamos capaces de manifestar en conjunto -la unión hace la fuerza- nuestro descontento para por lo menos quitarles un par de horas de sueño. ¿Qué diferencia hay en el nivel de preocupación por los ciudadanos por parte de: Cristina Fernandez de Kirchner, Mauricio Macri, Pino Solanas, Héctor Magnetto, Julio Grondona, Bartolomé Mitre, hasta la Iglesia y el resto de integrantes de la cúpula del poder que manejan el curso de la realidad? Podría decir que ninguna.
Unos en la búsqueda por llevar a la práctica sus ideas sobre una sociedad más justa, en el fragor de la lucha con los otros poderes en oposición, usan y otras veces denuncian métodos espurios para lograr alcanzar los objetivos que persiguen. Se ensucian con el lodo del campo de batalla y al final a veces es difícil distinguir a los integrantes de ambos bandos.
Por el otro lado, aquellos que desvergonzadamente se valen del padecimiento y la opinión pública, para usarlos como caballitos de batalla, en otra batalla más por mantener el estado de cosas que ellos mismos lograron, básicamente a través del dinero y el contubernio -con la iglesia y algunos entes formadores de opinión-, frente a los incesantes intentos de rebelión y supresión de la opresión, por parte de las clases directamente perjudicadas, que no son otras que las clases ubicadas en la base de la pirámide social y cercanías.
Para gran parte de estos bandos la ciudadanía no es más que algo prescindible, un elemento útil que permitirá el paso de mucho tiempo antes de ser completamente extinguida o diezmada, tiempo suficiente, este, para complacer sus egos y apetitos, suyos y el de sus consecuentes sucesores. Ambos bandos disfrutan de las comodidades y lujos que les brindan los beneficios de ser quienes eligen por nosotros la mejor forma de dirigir el funcionamiento de la nación.


¿Saben quiénes fueron los más perjudicados con el accidente ferroviario en Once? La clase trabajadora. Como siempre, es la primera y mayor perjudicada en cada crisis, sea cual fuese el índole de la misma.


Yo propongo impulsar el pedido de renuncia de Juan Pablo Schiavi, Secretario de Transporte, así como la renuncia de todo el equipo de esa Secretaria, la renuncia del principal encargado de la CNRT, y la quita de la concesión, de la línea Sarmiento, a TBA y demandar por administración negligente al sector del gobierno nacional que está encargado de suministrar los subsidios a las empresas de servicio público. 
¡Algo tenemos que hacer!, ¡No podemos esperar a que esto pase en el tren, o el colectivo en el que viajamos, o la calle por la que algunos de nosotros conduce su auto, y que además esperemos tener la suerte de sobrevivir a una accidente de esta magnitud, para recién manifestar nuestra preocupación por nuestra seguridad y la de nuestros familiares!.
Deberíamos proponer que la línea ferroviaria este a cargo de una empresa con antecedentes positivos en la gestión del transporte ferroviario, y sea auditada por un grupo de profesionales agrupados bajo una nueva institución sin fines de lucro, seducir la inversión de dicha empresa con subsidios, o beneficios impositivos, seguramente existen muchos medios para atraer la inversión de alguna empresa para al menos el rubro del transporte ferroviario.


Y nuevamente luchar contra la hipocresía de quienes dicen representarnos y abogar por nuestra seguridad, cuando jamás los vemos afectados por los errores u omisiones que ellos mismos cometen. Esos, que nunca se ven alcanzados por la desgracia y viven, sin merecerlo, rodeado de lujos y comodidades, autos y propiedades, ¿qué clase de tontos creen que somos, cuando dicen o ruinmente se valen de la famosa frase "todo pasa", para usarnos de esta forma?. Una vez más se me empacho la vista de: hipocresía, hipocresía, hipocresía.


Nota periodistica: http://www.lanacion.com.ar/1450635-descarrilo-un-tren-en-once-y-hay-varios-heridos

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