viernes, 23 de diciembre de 2011

Sobre: "La verdad y la belleza"

Muchas veces, la mayoría de las veces siendo jóvenes, nos hemos ocupado del tema de los ideales y los valores, hemos reflexionado sobre ellos, hemos adquirido nuevos -recuerdo cuando, en mi adolescencia, fui: vegetariano, ecologista, pseudohippie y hasta profesor en una ONG- y algunos hasta los hemos clasificado, todo ello con el objetivo de alcanzar aquello que nos requete recomendaron nuestros padres o a veces buscamos de forma casi inconsciente: alcanzar la felicidad o darle un espacio de expresión  a nuestro espíritu altruista y aportar, así, nuestro granito de arena para alcanzar, o al menos legar , un mundo mejor.
Las influencias fueron muchas cuando eramos jóvenes, entre ellos estaban: padres, profesores, tíos, primos, amigos, los amigos de nuestros amigos y en general "los grandes", la tarea difícil era distinguir, de entre todas, las mejores aptitudes o conductas para luego adquirirlas y pulir las mismas hasta volverlas útiles para nosotros, con el objetivo de alcanzar el objetivo mayor.
También cabe darle mérito al espíritu autodidacta y a la sabiduría libresca que este aporta y que -al menos para mí- es trascendental en la vida, ergo aquí la razón de este post. Se trata compartir con todos ustedes  un relato que se puede encontrar en el libro "La ciencia de la auto-realización" (online) escrito por A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupadaeste relato trata sobre la compatibilidad entre "la verdad y la belleza" e intenta darnos una lección acerca de cómo valorar correctamente a las personas, aunque yo creo que la lección también es útil para otros aspectos de la vida. Aquí el relato:

Había una vez un hombre muy poderoso y robusto, pero de muy mala reputación que se enamoró de una hermosa joven. Ella no solo era de apariencia hermosa, sino que también era santa, y, por consiguiente, no le gustaban las insinuaciones amorosas de él. Sin embargo, el hombre insistía debido a sus deseos lujuriosos, y, por lo tanto, ella le pidió que esperara únicamente siete días, y fijo el momento en que podrían encontrarse. Él accedio, y estuvo esperando con gran expectativa el momento señalado. Sin embargo, a fin de manifestar la verdadera belleza de la verdad absoluta, la santa doncella adoptó un método muy instructivo. Tomó grandes dosis de laxantes y purgantes, y durante siete días defeco y vomitó continuamente todo lo que comía.
Además, guardó todo el excremento líquido y el vómito en recipientes adecuados. Debido a los purgantes, la joven supuestamente hermosa enflaqueció y se puso tan delgada como un esqueleto, su tez se ennegreció, y los hermosos ojos se le hundieron en las cuencas del cráneo. De éste modo, a la hora señalada, ella espero ansiosamente la llegada del ávido caballero.
El hombre apareció en la escena elegantemente vestido y muy cortés, y le pregunto a la fea muchacha que esperaba ahí, por la hermosa joven con quien se iba a reunir. El no pudo reconocer que esa muchacha era la misma joven bella que buscaba; en efecto, aunque ella confirmó su identidad repetidamente, él no pudo reconocerla debido a su condición tan lastimosa. Finalmente la muchacha le dijo al poderoso hombre que había separado los ingredientes de su belleza y que los había guardado en unos recipientes. También le dijo que él podía disfrutar de esos jugos de la belleza. Cuando el galán mundano pidió ver esos jugos de la belleza, ella lo envió al lugar en el que estaban guardadas las heces y vómito líquidos, los cuales despedían un olor intolerable.
Así , el descubrió toda la historia del líquido de la belleza. Finalmente, por la gracia de la santa joven, este hombre de mala reputación pudo distinguir entre la sombra y lo tangible, y así recobro la razon. La posición de este hombre es similar a la de todos los que estamos atraídos a la falsa belleza material. La joven antes mencionada tenía un cuerpo material bellamente formado de acuerdo con los deseos de su mente, pero en realidad ella era diferente del cuerpo y de la mente materiales y temporales. En efecto ella era una chispa espiritual, y así también lo era el amante que estaba atraido por suu falsa piel. Sin embargo, los intelectuales y estéticos mundanos son engañados por la belleza y atracción externa de la verdad relativa, e ignoran la presencia de la chispa espiritual, que es simultáneamente verdad y belleza.
En la actualidad sin ser creyente de alguna religión o culto, sigo valorando la enseñanza que me dejó este libro, aunque confieso que en mi vida la mayoría de las veces la pasión desplaza a la razón, como suele suceder con muchos hombres (varones y mujeres), lo cual es comprensible y lo cual plasma a través de algunos ejemplos Daniel Goleman en su libro "Inteligencia emocional", sobre el cual me gustaría hacer un post en el futuro.

martes, 13 de diciembre de 2011

"Perros de la calle" y Eugenio Zaffaroni, sobre: "La cuestión criminal"

En Argentina, el programa radial "Perros de la calle" invitó al juez de la Corte Suprema Eugenio Raúl Zaffaroni a charlar (mp3) sobre el último libro escrito por el juez "La cuestión criminal".
Me llamó la atención la extensa cantidad de recursos conceptuales penales, sociológicos y estadísticos que utiliza para explicar las bases sobre las que esta escrito el libro, calculo que mi sorpresa se debe a estar acostumbrado a las pobres exposiciones de los actores, de parte del espectro político. En fin, espero que los temas que nos incumben a todos los ciudadanos -y aunque parezca redundante, lo hago extensivo a los ciudadanos de todo el país- sean cada vez más ricos en ideas, en vértices sociales -pensando en una representación poliédrica de la sociedad, en la cual la potencial abundancia de caras representan a segmentos sociales cada vez más específicos y cuyos vértices y aristas son puntos de intersección en temas aflictivos que enriquecen el debate- y que los periodos para desarrollar las soluciones a estos temas no estén atados o limitados a procesos electorales o a procesos en los que los poderes dirimen sus conflictos (como: un egoísta grupo político-empresarial versus el gobierno), me gustaría que empiece a pasar algo como eso.

Acá un articulo relacionado y acá la nota en Página12